¿Qué es y para qué sirve la tecnología M2M?

Hoy en día, muchas empresas están pensando en automatizar sus procesos, gestionarlos de forma remota y contar con datos que las ayuden a la administración.
Hacerlo es muy sencillo, gracias a las comunicaciones Máquina a Máquina (M2M o Machine To Machine), que permite a un dispositivos intercambiar datos con los sistemas de empresa y realizar acciones sin intervención de un operario.
¿Qué es la tecnología M2M?
El concepto de M2M es simple: comunicaciones entre dispositivos remotos y plataformas centralizadas utilizando algún canal de comunicación punto a punto. La red celular en particular, al tener una amplia cobertura y bajo costo, es una alternativa ideal.
¿Con qué fin? Para que los dispositivos intercambien información, y se pueda realizar monitoreo y control de forma remota, sin la necesidad de intervención presencial de un humano.
El concepto es sencillo, aunque el funcionamiento sí requiere de diversas plataformas, equipamientos y tecnologías de comunicación y procesamiento de datos. Es posible resumirlo en los siguientes componentes:
- Recopilación de datos: mediante dispositivos remotos, equipados con sensores que recogen los datos.
- Comunicaciones: la información viaja luego a través de una red de comunicación (inalámbrica o cableada), que no tiene que ser necesariamente Internet.
- Gateways: se trata de dispositivos especialmente diseñados para conectar diferentes equipos y redes, actuando como intermediarios entre los distintos ambientes (públicos y privados) y plataformas.
- Plataformas centrales: aquí llegan los datos para ser almacenados, procesados y analizados.
- Acciones automáticas: el análisis de los datos puede generar acciones automáticas, que luego pueden ser realizadas remotamente si los equipos en terreno cuentan con esas capacidades
Para que te hagas una idea más clara del funcionamiento de esta tecnología, piensa, por ejemplo, en el sensor que toma lecturas de la humedad de un cultivo agrícola.
Toda esa información llega al software de procesamiento que detecta la deficiencia hídrica en algunos puntos del campo y, por lo tanto, activa los sistemas de riego inteligente sin intervención directa del agricultor.
Aplicaciones de la tecnología M2M
Teniendo en cuenta lo anterior, la tecnología M2M puede usarse para tareas tan sencillas como automatizar la iluminación de tu casa (con sensores de movimiento) hasta procesos complejos en todo tipo de industrias.
Algunos casos de usos comunes son:
- Seguimiento de vehículos en tiempo real: valiéndose principalmente del GPS, te puede proporcionar información de la velocidad a la que viaja y su ubicación exacta.
- Mantenimiento predictivo de activos productivos: sensores instalados en máquinas, equipos y vehículos leen indicadores como la temperatura, las vibraciones, la presión y los niveles de líquidos, para decirte cuándo va a fallar alguno de los componentes.
- Medición inteligente del consumo de servicios domiciliarios: los sensores envían las lecturas automáticamente al proveedor del servicio.
- Monitoreo remoto de pacientes: los dispositivos miden variables de salud y bienestar de personas enfermas, para mantener a los doctores al tanto de todo y mejorar los resultados de los tratamientos médicos.
- Automatización de procesos industriales: puedes instalar sensores en la maquinaria de tu fábrica para automatizar procesos y mejorar la productividad.
- Agricultura inteligente: los sensores de humedad, temperatura y aire te dicen cuándo regar y en qué puntos exactos del campo.
- Sistemas de seguridad inteligentes: cámaras conectadas a la red activan las alarmas cuando detectan movimientos inusuales en el espacio vigilado.
- Gestión de inventario: sensores en estantes y productos te dicen dónde están los artículos, cuántos quedan y cuándo deberías realizar la siguiente compra para no quedarte sin stock.
La lista es larga y versátil. Prácticamente, puedes usarla para automatizar o controlar de forma remota lo que quieras. Sin embargo, cualquier implementación debe ser precedida de un análisis de necesidades del sistema y un modelamiento de la solución, de forma de configurar una arquitectura óptima y que cumpla con las necesidades del usuario.