El distanciamiento social adoptado para combatir la pandemia de COVID-19 ha obligado a las organizaciones a modificar su manera de trabajar, optando por el teletrabajo como una forma de mantener la continuidad operativa sin arriesgar la seguridad de los trabajadores.

Según una encuesta realizada por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), 95% de las empresas chilenas practican el teletrabajo y, de estas, poco más del 81% lo implementó a raíz del coronavirus. Esto, desde luego, se ha traducido en una transformación radical en la manera de trabajar. En ese sentido, el liderazgo de los equipos de trabajo constituye un factor determinante para el éxito de esta modalidad.

Liderazgo: la clave del teletrabajo

Las empresas funcionan bien cuando sus colaboradores se sienten considerados y útiles en su trabajo, esto no es ningún misterio. Sin embargo, ¿cómo se logra ese ambiente y nivel de satisfacción, sobre todo a distancia? Un elemento esencial para ello es contar con buenos líderes, capaces de adecuarse a las circunstancias y que sean capaces de transmitir:

1. Confianza en el equipo

La confianza es la base para cualquier tipo de trabajo, pero es especialmente importante cuando las labores se hacen a distancia.

Los jefes de área o de equipos deben ser capaces de confiar en sus colaboradores y demostrarlo. En ese sentido, es necesario adoptar un cambio en la manera en que se mide el rendimiento, pasando de cumplir una jornada laboral -como se haría en modalidad presencial- a velar por el cumplimiento de objetivos o metas diarias.

De esta forma, los trabajadores tendrán claras sus responsabilidades mientras que los líderes se enfocan en sus propios quehaceres, agilizando los procesos e incrementando la productividad.

2. Motivación y empatía

La motivación es otro rasgo de liderazgo que marca la diferencia y que puede llevar a los equipos a tener un mejor desempeño. Hacerles sentir importantes y valorados en la organización será la clave para lograr una mejor productividad. También es crucial ser empático con los colaboradores, entendiendo que el confinamiento puede generar estrés y afectar el normal funcionamiento de cada trabajador.

3. Comunicación fluida y clara

Para lograr buenos resultados con el teletrabajo, la comunicación es la clave, tanto entre áreas como entre los distintos integrantes de un equipo.

Esto permitirá definir claramente las tareas por desarrollar, los responsables a cargo y cómo deben interactuar los distintos profesionales involucrados para realizarlas. En la misma línea, es fundamental fomentar el feedback, ya que así es posible optimizar los procesos y mejorar los resultados, además de ser una instancia que permite que los trabajadores se sientan considerados y de importancia para la empresa.

Para conseguir lo anterior, es imprescindible contar herramientas tecnológicas que permitan -entre otras cosas- compartir material, editar documentos de forma colaborativa, almacenar documentos y acceder a ellos en cualquier momento y lugar, y realizar reuniones virtuales. En definitiva, que incentiven el trabajo remoto, la base de la continuidad operativa en tiempos de distanciamiento social.

En este sentido, Office 365 -de Movistar- es ideal para optimizar el teletrabajo gracias a sus herramientas especialmente diseñadas para ello. De esta manera, las empresas pueden mantener su continuidad operativa mientras su personal trabaja a distancia, pero apoyándose en una plataforma amigable, robusta y que permite que las tareas a distancia se lleven a cabo de forma clara, ordenada y siempre en tiempo real.